Capplannetta No Apto para vivir

Hoy es el último día del año 2022. Año en el que me descartan para vivir solo o acompañado. No apto. No apto para vivir al margen de la vida en conexión. Allí donde vaya llevo mi oscura sombra y me alejo, me voy yendo de mí. Ser una persona corriente es lo que me hace diferente. No me parezco a nadie, ni siquiera a mis sosias, o a los poetas que andan crápulas por el callejón de la melancolía. He vivido mucho tiempo solo, y creo, digo bien, creo, que el hecho de estar solo es el acto para el que soy apto. Me reincorporo, me desmayo, me trastorno, caigo en redondo, y otra vez a levantarse, y así, pierdes el apetito del todo. Mañana ya será 2023, y yo he tenido un año peculiar. Soy persona nom grata en todos los lugares de la Tierra. Ya sea en los de imperativo categórico o en los lugares donde viven con los pies en el lodo. Me siento desnudo, pero es algo que tengo tan asumido que ya no me cansa. Estoy dejando de fumar y estoy dejando una pastilla ansiolítica. Sigo siendo yo a pesar de… no creo en la familia como institución. Me conformo con que el hecho de ser un single, un outsider, o un loser si lo prefieren. El perdedor siempre debe estar preparado para la derrota siguiente. A veces he caído de boca en el sinsentido del ridículo. Pero el sentido y la lívido las tengo intactas. Me dicen: —Para yo volverte a querer tienes que nacer de nuevo y saber que has de perder. Sí, he perdido muchas veces a lo largo de mi vida. Pero las cábalas, las medio verdades, la falsa modestia, la carente humildad, son cosas que no van conmigo. Con la soberbia no se va a ningún sitio. Nos queda recorrer un largo camino. Ya se oyen campanas en China, pronto vendrán los encierros, al menos eso creo. Esas campanas que se oyen no son villancicos. Son enfermedades con un caldo de cultivo que viene a quedarse para convivir con nosotros. Llevo años muriéndome en Navidad. Aunque la Navidad sea fría ahora también hay un sol de invierno con el que ponerse enfrente para nutrirte de vitamina D, o la que sea. Pasará el invierno, y otra vez vendrá la primavera. Hoy, 31-12-2022, he dejado el tabaco y he hecho sacrificios. Pero queda el más importante. Tú.

Deja un comentario