Capplannetta ha visto al diablo

No sólo he visto a sus Satánicas Majestades (The Rolling Stones) también he visto al diablo en cada pelea, en cada despechada mujer, en delitos que cometí de joven, en las drogas y el alcohol, en los amigos muertos, en las calles, en los antros y tugurios de mala muerte. Incluso he visto miseria, pero donde vi a Dios fue en las personas más pobres y más vulnerables. Uno siempre vuelve a aquellos lugares donde amó la vida…como dice la canción. En Perú es el lugar donde he sido más feliz, y a la vez, el más desgraciado. Desde que murió la que era mi suegra todo me ha ido mal, me costó mi matrimonio, mi mujer dejó de quererme porque no estuve a la altura del funeral de la que fue mi suegra durante ocho años. Conocí a mi suegra antes que a mi propia exmujer, y no es que hiciera de Celestina. Fue porque vino a España a trabajar de interna. Cuidaba con mucha paciencia no a una anciana, sino a cuatro. Dos de las ancianas sobrevivieron a la pobre de mi suegrita, Zoila, Dios te tenga en su reino.

Pero también ha habido momentos duros en la vida, no sólo ese. He perdido buenos amigos, he luchado dejando para siempre la droga, que no es fácil. Y ahora estoy entre Pinto y Valdemoro, como se suele decir. Hace poco perdí a una amiga madrileña. Susi, —ya sé que tú no eras creyente, pero eso a Dios le da igual. Dios es bueno. Ahora cuando llega la oscuridad me acompañan las sombras y los demonios de antaño. Pero lograré sobrevivir. Quiero salir con ayuda de mi médico de este trance. He hablado mucho sobre ello. Ya basta. No quiero cansar a nadie. Ahora tengo amistades nuevas, y algunos tienen problemas y hace tiempo que no los veo, pero llegas a una edad que o te quedas majara o te espabilas. Yo me he espabilado, modestia a parte. Me bebí mi propia maldición y vi al demonio. Al demonio verdadero. El que llevan algunos hombres consigo. Ese demonio te hará atemorizarte, alienarte como persona y no está en el infierno, ya que va en coche oficial.

Algún día, o ahora, pueden comprar mi novela poética gonzo Cibernética esperanza en ED. Vitruvio. También en la Casa del Libro o en cualquier librería si la solicitan. Es un fragmento de mi vida junto a una conclusión no sé si certera. A los que quieran comprarla pueden hacerlo también aquí www.nuevoateneoonline.com y la tendrán en casa lo más pronto posible. Pero recuerden, la de Vitruvio es la buena, expongo la portada. Es que en 2019 la coedité en Avant Editorial, pero sólo tenía 200 páginas. La de ED. Vitruvio es más extensa, he quitado bisagras, he atornillado algunos errores y es casi perfecta. No se asusten. No van a ver al demonio, quizá el verdadero demonio fuese yo. Bueno, espero que se venda, y la valore el respetable público lector. Acepto críticas siempre constructivas.

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