
El trabajo de escritor es solitario y requiere cierto pudor. Ya se sabe que el escritor tiene que enriquecerse con lecturas que le plazcan, aunque también con otras que le resulten pesadas. Yo voy por un camino solo en el que mi criterio se desplaza a la hoja en blanco, después hay que corregir, cosa importantísima a la hora de publicar, y después la cosa más temida para mí: encontrar una editorial decente que publique tu trabajo. Una vez publicado el texto ya no te pertenece. Si escribes sobre tecnología entrarás en un laberinto sin salida ni fin, ya que la tecnología avanza a grandes pasos. Yo no sé hablar por teléfono, me pongo muy nervioso, pero en los blogs que administro y publico me explayo como un escritor profesional, aunque me considere un aficionado.
Al ser un trabajo solitario estás dependiendo de una responsabilidad que es como engendrar una criatura. Engendras personajes, espacio o ambiente, detalles, pero para escribir relato o novela las directrices ya están marcadas: exposición, nudo y desenlace. Dentro de estas reglas se puede crear un texto, también es importante la estructura de la obra, el tiempo o el ritmo de lo escrito. Al ser un trabajo minucioso donde tiene importancia el pudor y el rigor. Aunque este que les escribe no es un escritor en toda regla, es un aficionado a los malabares con palabras y versos que trato de que no sean epígonos.