Capplannetta y los consejos sobre poesía

Tengo pocos aunque buenos amigos. Y estos amigos me han aconsejado bien sobre cómo llevar a cabo mi poesía. Por ejemplo, mi amigo el señor de Bidaxune, me dice que con respecto a las opiniones que tengan otros sobre mí poética rimada, que siga escribiendo lo que crea oportuno y que me llene, y tiene toda la razón. Mi pregunta base es: ¿por qué tiene tan mala prensa la poesía rimada? Yo, cuando me pongo a escribir no tengo claro anticipadamente cómo será el poema. Mi editor, Pablo Méndez, me aconseja que escriba lo que quiera, pero opina que la poesía rimada es cacofónica. En algunos poemas sí he notado cierta cacofonía. Aunque el próximo libro de poemas que escriba será sin rimar. Intentaré escribirlo con imágenes precisas y preciosas, metáforas que deslumbren a todo aquel que me lea. Sin lugar a dudas seguiré rimando. Debo confesar que me ha llevado algunos años adaptarme a la rima. Pero el próximo libro seguro será de poemas blancos. La métrica es otro cantar. Seguramente lo publicaré en Ediciones Vitruvio. Pero para eso debo impresionar a Pablo. Ahora debo luchar por los dos libros publicados en Vitruvio. Reconozco que es ahora mi momento de publicar y escribir como quiero. Sobre versos rimados se ha escrito mucho, y de una manera brillante. Desde el Siglo de Oro, hasta la Generación del 27 ha habido verdaderas obras maestras. Y muchas de ellas rimadas. Decir lo que se quiera decir rimando o no, debo de tener una pureza de un diamante ya pulido. No es fácil rimar, pero en esta nueva era no debemos olvidarnos del movimiento Hip Hop, ni tampoco omitir las décimas y serventesios de Joaquín Sabina. Los sonetos de Sabina tienen una calidad excepcional. Tampoco olvidemos a poetas que riman como cantaores en el mundo del flamenco. Podemos recordar los poemas rimados desde Miguel Hernández hasta la poesía rimada de la premio Nobel Gabriela Mistral, o las canciones de José Alfredo Jiménez. Al respecto de la influencia rimada en el movimiento Hip Hop tenemos a los Calle 13, a Frank T, o el rapero Tote King. Recordemos a la canción popular de Violeta Parra y el gran Victor Jara.  La poesía rimada tiene verdaderas delicias como por ejemplo rimas interiores, rimar en serventesio, el soneto o el sonetillo, según sea la métrica en ambos. También está la parte de rimar como en el romancero. ¿Qué sería de los romanceros como los de Lorca, o también Joan Manuel Serrat? O tal vez las milongas compuestas por Jorge Luis Borges. La poesía rimada goza de muy buena salud. Aquí en España está infravalorada pero podemos hablar de rima en inglés o en francés, como por ejemplo el gran Bob Dylan, y en francés recordemos a Baudelaire en Las flores del mal, cierto es que la poesía en verso libre se le puede sacar más jugo que a la poesía rimada. Pero subrayo que no es fácil, y a mí me supone más divertido rimar que el límite al escribir.