Capplannetta y las canciones monotema

Existen canciones que nos acompañan para siempre a lo largo de nuestra vida. También hay canciones que nos recuerdan un amor u otro, pero existe gente que convierten las canciones en monotemáticas, dejando éstas una importante huella en las mentes de algunas personas. Cuando una canción se convierte en monotema es peligroso hacérselo saber a tu nueva pareja viniendo de una relación anterior duradera, más sí la relación fue tu exmujer, la nueva pareja te lo reprochará siempre, por eso es mejor no ser demasiado monotemático, ya que algunas personas se convierten en obsesión, no todas, pero existen algunas que dejan huella. Lo malo es el caso a la inversa, que ella te cuente a ti la canción que le cantaba, o le recuerda, o la teletransporta con la ex pareja de tu actual amante, enamorada, o novia. Entonces el celoso eres tú. Son tantos los celos que te provocan que acabas por cogerle asco a la canción. Y te vienen unas tremendas náuseas con tan solo escucharla cuando estás comprando, o en un restaurante, o incluso en la cola del súper del barrio. También está el lado masoquista, esa vertiente nuestra masoca que escuchas la canción por el hecho de recordarla. Conozco gente que es, por ese lado, tan masoca que se hacen una playlist, y no sólo eso, sí es un tío o una tía que ha tenido muchos fracasos con parejas le ponen nombres a las playlists y entonces viene la pelea, cuando tu nueva pareja descubre tu playlist oculta en la plataforma de música se monta la de Dios, pero aún más si tu ex es extranjera, con la nueva pareja basta con que escuches una canción del folclore del país de tu ex para que se monte el tangai musical.  Es mejor hacerte playlist mezcladas, o mejor decir, barrechadas, pero es durísimo entender, no por que te lo diga, que esa es otra, cuando lo descubres por cómo se comporta cuando escuchas la canción. Hay gente que cambia el disco, o pasa a la siguiente canción, porque repito lo de las náuseas, le coges tanto asco a la canción que le rayas el CD o el vinilo donde está la canción, con el mp3 es distinto. Ahora ya no hay que poner nombre a las playlist, pero a veces es tanta la obsesión, que te descargas el repertorio para suicidarte.