
Llevo con gran orgullo mis raíces andaluzas, pero sobre todo el haber visto Sevilla. Sevilla City para el movimiento Hip Hop, ya que dicen que es la capital (Sevilla) del movimiento. Porque Sevilla no es sólo la Semana Santa, las tascas de tapas y la feria de abril. Sevilla es una ciudad bellísima, de las más bonitas de Europa. No sólo también por su folclore, sus monumentos y su belleza andaluza, Sevilla es para mí misterio, embrujo, misticismo, arte y pasión, y sentimiento. Grandes pintores, poetas y gente ilustre anduvo por sus calles. No sólo tiene encerrada las vísceras del mundo tropical, ya que, solamente he conocido dos ciudades con magia, Sevilla la una, y Lima la otra. Hay que vivir las ciudades desde sus amaneceres, desde sus madrugadas y desde sus auroras y crepúsculos. En Sevilla conocí la picaresca, en Barcelona también, y en Lima también, en Madrid conocí el mundo oscuro del vicio y los antros cochambrosos. Andar por la calle Sierpes es toda una experiencia, y ver la Giralda desde la plaza de España es algo bonito, pero el barrio de Triana es algo con duende y fundamento que hace ver de Sevilla la quinta esencia de la antigua Andalucía, es como visitar el viejo Callao, o la taberna Santiago Queirolo en Lima. Vuelvo a repetir que Sevilla City es la capital del movimiento Hip Hop porque han salido de ahí muchos MC’s y productores buenos, y en el mundo del flamenco está el octogenario cantaor payo de Villanueva del Ariscal, Márquez “El Zapatero”. Gran cantaor sabio y sevillano. Algo bello en Sevilla es un paseo en coche de caballos y contemplar por la giralda parte de la idiosincrasia sevillana que son sus blancas palomas. Sevilla es universal, y una ciudad digna de ver.