Dices que tienes pocos amigos, pero los que tienes son de verdad, quizás tengas ¿Tres? ¿Dos? ¿Uno? ¿Zero? Jejeje, y todo por esa terca manía tuya en empeñarte en ser poeta, como también esa otra manía de leer libros, como si no lo tuvieras ya todo leído. A tus 39 años has leído la verdadera negritud sobre el blanco, has leído las mil arrugas de la cara vieja de la vida, sin embargo, te empeñas en aferrarte a la esperanza, como si no supieras que final tiene todo, mira lo que te digo, a estas alturas, poco importa si tienes o no amigos, si mantenéis una correspondencia desde distancias lejanas, eso sí, siempre salvaguardando esas distancias, pero ¿cómo quieres que te sigan en ese empeño tuyo por entender la vida a través de los libros? La vida no hay quien la entienda, pero una cosa es cierta, amar has amado, y que te quiten lo demás, eso explicaría tu interés por comprender la vida a base de leer y releer, por que para dar el primer paso hacia la filosofía el principio debe estar precedido por el amor; sí, ya lo sé, esa reflexión no es mía, ¿pero qué narices importa de quién sea un pensamiento u otro si al final todos vamos a terminar por el mismo Despeñaperros?